Estar en las redes sociales no sirve solo para vender

Las ventas son el punto de mira de cualquier empresa. Son las que aseguran su sostenibilidad y al final el objetivo mismo de una empresa en sí. Sin embargo, hay otras accioneos que influyen de forma indirecta en las ventas y que pueden significar un impulso importante en un momento de la vida de esta. Se trata de las acciones de comunicación y de creación de marca. Y es que, cuando uno consigue ser el que es y todos le reconocen por ello, es más fácil encontrarle y sobre todo, salir a buscarle directamente a él.

Así, las redes sociales no son una herramienta de venta directa. Estar en cualquier red social no significa aprovecharla para enviar ofertas a montones, sino que consiste en crear una comunidad de usuarios interesados en el universo de la marca, el que esta ha creado para satisfacer a sus usuarios.

De este modo, si las redes sociales no tiene como objetivo vender, ¿para qué sirven y por qué las empresas las utilizan? Ahí van algunas razones:

  • Establecer vínculos entre la empresa y sus públicos de interés: ofrecer información interesante, un valor añadido…Ofrecer algo por lo que el usuario deba estar ahí y le interese seguirnos. Si le damos información de calidad, tendrán motivos para volver y estar “conectados” con nosotros, lo que reforzará la imagen de la marca.
  • Competencia: si el resto de empresa lo hacen, con más razón hay que hacerlo, ya que sino se están perdiendo posiciones. La comunicación con los usuario es un aspecto importante a mejorar, tan importante como lo puede ser el propio producto, ya que no solo se venden las características de un producto o servicio, sino aspectos esenciales como su presentación, la forma de presentarlo, la forma de atender o el servicio postventa, aspectos claves en el proceso de decisión de compra.
  • Defenderse y escuchar: a través de los medios sociales, la empresa pueden defenderse de acusaciones o comentarios negativos que puedan tener lugar en la Red, pero además, también sirven para estar atento a lo que se critica de la empresa, utilizando estos comentarios negativos como información valiosa para poder seguir mejorando el producto y el servicio ofrecido.
  • Posicionamiento: las páginas sociales tienen cada vez más peso en los buscadores. Poder crear contenido en nombre de la empresa con mayores posibilidades de posicionamiento, aumenta las posibilidades de ser visto en este gran ciberespacio.

Además de todo ello, crear una imagen de confianza, credibilidad y preocupación por los usuarios, son conceptos que beneficiarán a largo plazo la imagen de la empresa.

Neuromarketing: el secreto de las estrategias de marketing que funcionan

Conocer los instintos más primitivos del ser humano puede ser muy útil a nivel de marketing. Cómo influyen ciertos mensajes, olores, colores o sabores, pueden dar respuesta a claves comerciales para dar en ese punto de la diana donde se produce la venta. Mucho o poco razonada, será ya cuestión a parte.

Diferentes estudios apuntan a que un 85%  de las decisiones de compra son inconscientes. Las emociones, el aprendizaje, la conducta, la memoria, son conceptos psicológicos que ganan terreno en el sector a través del neuromarketing, dispuesto a ofrecer soluciones en diferentes áreas, desde la atención al cliente a la publicidad y el posicionamiento de la marca.

El objetivo es crear una cercanía, una sensación adaptada a los requerimientos más primarios del usuario, precisamente eso que le aporta cierta sensación y bienestar, sin que sepa muy bien por qué. Ahí se encuentra el fruto del estudio de esos procesos cerebrales que llevan a tomar una determinada conducta o decisión de compra.

A pesar de sus ventajas, la implantación del neuromarketing todavía es una utopía. Los psicólogos no disponen aún de un lugar reservado en las empresas para este fin, es algo difícil de encontrar a pesar de la influencia y del poder que puede tener a la hora de definir ciertas estrategias comerciales.

A pesar de las limitaciones que encuentra, el neuromarketing hace tímidas apariciones, como por ejemplo en el Institut de Formació Continua de la Universitat de Barcelona, que ofrece cursos de especialización en esta área.

Seguro que poco a poco estos tipos de formación ganan aceptación. Invertir en investigación y en algo tan abstracto como las emociones o posibles conductas estereotipadas, parece que se aleja de los objetivos comerciales de la mayoría de empresas en tiempos difíciles económicamente.

Loewe se vende en la Red en menos de 3 minutos

El poder de las redes sociales es indiscutible. La viralidad forma parte ya de cualquier gran firma, pero aprovechar este canal para hacer fuerte una marca, es cuestión de arte, estrategia y cosas bien hechas. Loewe se encuentra en un momento delicado. No a nivel particular, pero sí general dentro de un marco de crisis. Los clientes habituales de sus productos pueden estar apretándose el cinturón.

En este sentido, hay clientes con poder adquisitivo que seguirán acudiendo a sus tiendas, pero habrá otros, quienes se permiten un capricho Loewe pocas veces en la vida, que o bien recurrirán a la sencilla opción de la imitación, o bien seguirán conformándose con sus bolsos de gama media.

Así, lo único que puede hacer Loewe es destacar lo mejor que tiene: su saber hacer, su artesanía, eso que le ha hecho ser una marca única, envidiable y el orgullo en complementos de calidad fabricados en España.

Para hacerlo, ha elaborado este video de menos de 3 minutos de duración. En él se ve, sin necesidad de palabras, cómo se crea un bolso, paso a paso. Las manos que lo elaboran, las piezas que se cortan, las herramientas tradicionales… En definitiva, todo un proceso de creación que empieza con la selección de los materiales de primera calidad, para después plasmar en ellos los diseños que se han elaborado en un proceso de elaboración lleno de mimo en cualquiera de sus partes.

Sí, un bolso Loewe es caro, pero no quiere que nos olvidemos de que lo vale. Y es por ello por lo que sus clientes están dispuestos a pagar un precio más alto.