El Community Manager es la persona responsable de dinamizar una empresa, producto o medio en las redes sociales. No estamos descubriendo nada nuevo, pero esta profesión en alza que, a priori, parece la panacea tiene sus pros y sus contras al cargarse de excesiva responsabilidad sin muchas veces merecerlo.
Dentro de los pros podemos decir que es una profesión en auge que tiene mucho que explotar y que sus profesionales son cada vez más demandados en todo tipo de sectores. El community manager es una persona activa que busca, investiga, realiza contactos, publica noticias del sector y de la propia empresa; en defintiva, un trabajo dinámico que permite descubrir miles de cosas cada día.
Ahora bien, los contras del community también están presentes y, la gran mayoría de ellos, están relacionadas con la reputación y el marketing de la empresa dada su presencia en las redes sociales. Como la atención al cliente es continua, al estar interaccionando con los seguidores de cada comunidad, puede verse atacado por un aluvión de críticas y de mensajes negativos hacia la empresa que él mismo deberá solventar.
Algunas empresas ofrecen apoyo, pero muchas otras se lavan las manos dejando que esta tarea la maneje el community aunque no sea realmente su responsabilidad. Si bien, el social media manager se ha comprometido tanto con la empresa que da la cara por ella en las redes sociales, por lo que está bien antes de concretar sus funciones para fijar hasta donde puede llegar dentro de su trabajo.
Un buen community, entonces, debe ser capaz de controlar ciertas situaciones y momentos de crisis relacionados con la reputación de la marca, pero siempre en coordinación con los gestores o responsables de la compañía a la que representan. Es decir, debe saber al dedillo cuáles son las campañas de marketing que se han realizado y se establecen en cada momento y cuáles no han funcionado correctamente para saber gestionar los problemas de forma correcta.
Está claro que su papel es importante pero no tiene porqué responder por la empresa siempre si esta no ha obrado correctamente. Otro de los contras de esta figura es la cantidad de funciones extras que puede realizar y que surgen por necesidades. De la gestión de las redes se pasa a la gestión de la empresa en otros portales, a redactar el blog, a traducir, a diseñar la web y otras veces a realizar toda clase de acciones de marketing on line.