Leía una interesante reflexión de Jeanniey Mullen acerca de la efectividad del email marketing. En ese aspecto, subraya la importancia de redactar un asunto atractivo. Normalmente se invierte mucho tiempo en la estrategia, el diseño, el contenido, el lenguaje a utilizar, html o sólo texto, con o sin imágenes… Y luego queda una última línea. Unas pocas palabras que pueden influir en la decisión del destinatario de abrirlo o no abrirlo. Y aquí comienzan los problemas…
Estamos en una sociedad absorbida por internet, y se habla incluso de saturación en el correo electrónico. Es por ello que cada vez resulta más difícil llamar la atención de nuestro destinatario para que abra el email que le hemos enviado. Son muchas las herramientas que tenemos a nuestra disposición para hacerlo, pero las pocas palabras de las que disponemos para poner en el asunto del mensaje forman a día de hoy una de las partes más importantes del camino al éxito en nuestra campaña de email marketing.
Vivimos una situación económica delicada, y, como se suele decir, el hambre agudiza el ingenio. Es el momento de ser más creativos e innovadores. Y en términos de innovación tecnológica, actualmente podemos leer nuestro email en el ordenador de sobremesa, portátil, dispositivos móviles, redes sociales, en la PSP o NintendoDS… En el aeropuerto, en el hotel… Es una realidad, y, en el futuro, podremos acceder a nuestro correo electrónico desde cualquier parte del casa, como frigoríficos o el televisor, el despertador, etc.
Si podemos leer el email en cualquier momento y situación, la importancia del asunto del mensaje se multiplica por mil. Es decir: estamos en la sala de espera de la consulta del médico, sin nada mejor que hacer. En ese momento, incluso el asunto más superficial puede atraernos y abriremos ese mensaje, porque nos viene bien cualquier cosa para pasar el rato. En el lado contrario, si recibimos el mismo email en un aeropuerto mientras caminamos hacia la puerta de embarque en un aeropuerto, las posibilidades de que abramos ese correo se reducen a prácticamente cero.
Algunas recomendaciones para obtener el mejor impacto en nuestras campañas de email marketing eligiendo el mejor asunto:
- Recopilar y analizar hábitos generales de lectura de email de nuestro público objetivo. Es un aspecto muy difícil de controlar, pero teniendo esta información, podemos programar nuestro mailing para que sea recibido un día de la semana concreto a una hora concreta y aumentar nuestra efectividad.
- Habla con tus familiares y amigos. Pregúntales sobre sus hábitos, sobre todo si no se mueven en ámbitos de marketing o internet, e infórmate sobre sus prioridades y planes para los próximos días o semanas. Seguramente te encontrarás con sorpresas, como ir de compras en rebajas, ocuparse de los preparativos para el derbi Barça-Madrid. De uno u otro modo, cualquier actitud puede darte pistas sobre el tema a utilizar en el asunto del email para captar su atención. Los temas “de moda” suelen tener una efectividad mucho mayor.
- No te olvides de los que no responden. Que no abran tu email en 72 horas no significa que no les interese. Quizá sólo es que no les hemos pillado en el momento oportuno. Los mensajes son más eficaces cuando se envían tres veces a una persona que no ha respondido (siempre que no sea exactamente el mismo email, evidentemente). Muchas compañías se centran en el 30% de los destinatarios que lo han abierto y se olvidan del 70% que no lo ha hecho. Un asunto con expresiones como “Última oportunidad” o “Sólo quedan 3 días” pueden ayudar a activar hasta al 50% de quienes no habían respondido.
Si bien la elección de un asunto adecuado es una parte muy importante del éxito de nuestra campaña de email marketing, no hay que olvidarse de otros aspectos, como la distribución, la coherencia de contenido y diseño con otras creatividades como banners, y página web, etc.
Suerte 🙂