Fácil, rápido, con precios competitivos y sin esperas ni colas. Son algunas de las ventajas del comercio electrónico, que vive sus momentos más dulces en nuestro país.
Y dentro de éste, las páginas web del sector moda vuelven a despuntar al pasar de 100 millones de euros en ventas en 2008 a un total de 400 millones de euros en el año 2011. Hoy en día pocas son las empresas de venta de ropa, complementos y zapatos que no tengan su versión on line y vendan directamente desde la red.
Los comerciantes se han dado cuenta de que muchos usuarios acceden a sus tiendas a través de Internet, pero no sólo para informarse o ver el catálogo de la nueva temporada sino para comprar cómodamente desde cualquier lugar. Ello permite no desplazarse a ninguna tienda física, escoger y adquirir la prenda adecuada.
Los datos del estudio de la empresa española DBK sobre el comercio electrónico en el sector moda nos ofrece más pistas sobre el crecimiento exponencial de este mercado.
Los usuarios que entran son cada vez más jóvenes y se ha frenado la barrera que impedía comprar con seguridad en la red gracias a la confianza en las transacciones electrónicas que ahora éstos tienen sobre el comercio on line.
Aquellos portales que no están unidos a una red de tiendas tuvieron ventas de 265 millones de euros el pasado año, siendo los principales operadores de la red. Mientras que las cadenas de moda, que realmente están asequibles en prácticamente todos los rincones de España por su popularidad, se mantienen en sus facturación a través del comercio on line.
Y las cadenas de moda que se definen como tradicionales consiguen copar un negocio total de 165 millones de euros en 2011, quedando en una buena posición.
¿Pero qué compran, principalmente, los usuarios en la tiendas de moda electrónicas? La ropa sigue siendo la preferida sobre todo entre las mujeres, pues ocupa el 70% de las ventas totales. Seguidamente, se compran zapatos, con el 18% del total de facturación, algo que quizás resulte difícil al no saber muy bien cómo nos quedará el zapato sin poder probarlo.
Las previsiones, según DBK, van a ser muy positivas. Se estima que durante 2012, las tiendas de moda en la red en España consigan lleguen a la cifra de 700 millones de euros.
Algunas de las medidas que deben adoptar estas tiendas para seguir adelante se basan en la renovación del stock expuesto que ha de ir cambiando semanalmente para que el usuario acostumbrado a este tipo de compras pueda ver ofertas continuamente.
Por otra parte y, aunque es algo más costoso, debe conseguirse más stock de un mismo producto, pues los usuarios pueden cansarse del “agotado” y no entrar más en la web. Con la vida móvil, muchas ofertas deben poderse descargar fácilmente a través de los smarthpones y facilitar la comprar con estos dispositivos.
Y es de vital importancia que la tienda de moda tenga un perfil en las redes sociales que permita no sólo ir informando de sus novedades sino la interacción con el usuario directamente. Ello les va a permitir saber qué cambiar y qué mantener, y actuar en consecuencia siempre según las necesidades del target que interesa.